En México, desde los años 90, se emplea el término tercer sector para analizar nuevas formas de organización social, derivado de un espacio destinado a complementar la labor del Estado. Se destaca la importancia de las organizaciones de la sociedad civil (OSC) como característica principal en la etapa neoliberal, surgida del Postfordismo y la globalización. A partir de la segunda mitad de los 90, se observa la proliferación y diversidad de actores sociales que buscan ser parte de las decisiones públicas y de la sociedad civil. Estas organizaciones son impulsadas por el Estado y otras instituciones multilaterales, en medio de la lucha por la democratización y la participación ciudadana. Las OSC siguen siendo objeto de estudio en México, donde la sociedad civil es débil históricamente y el Estado se orienta hacia la democratización pública.