La sencillez de las cosas es la clave para responder al caos político, social y económico causado por el régimen de 1978 en España. Este régimen no es una democracia, sino una monarquía de partidos estatales que impide a los ciudadanos elegir libremente a su gobierno y a sus representantes. Este desastre es impulsado por el sistema electoral proporcional. En este libro se analizan las instituciones que sostienen este Estado actual, se describen sus problemas, sus raíces y su impacto en la vida de los ciudadanos. Se propone la solución que la República Constitucional ofrece para cada uno de estos problemas, basada en la libertad de los ciudadanos que es tomada por los estados con la bendición de la corona.
El Gobierno solo será legítimo si su presidente puede ser elegido por toda España en una elección directa y por mayoría absoluta en una segunda vuelta si es necesario. Un hombre, un voto; un distrito, un diputado. La República Constitucional finalmente separará los poderes del Estado y establecerá una representación política verdaderamente representativa de los ciudadanos.