Este libro investiga la industria de autopartes en México, analizando los procesos de modificación en diferentes niveles desde la perspectiva regional y de las plantas de automóviles. El objetivo es estudiar las tendencias en los procesos de descentralización y política de oferta global durante el período 1994-2020, desde el NAFTA hasta el TMEC. Se destaca el importante papel de la industria proveedora de autopartes, que es el quinto productor a nivel mundial y concentra el 89.4% del empleo en la industria automotriz mexicana. Además, se aborda la automatización en la industria de autopartes, vinculada al proceso de la Industria 4.0.

El enfoque regional es fundamental al analizar a los proveedores de autopartes, dado que la industria está altamente integrada en los tres países del T-MEC. Se menciona la manufactura a nivel global en otras regiones, como Europa del Este, no como un estudio comparativo, sino como referencia para entender lo que ocurre en países en desarrollo. También se examina el nivel de planta, incluyendo los mercados laborales internos y aspectos como cultura organizacional, riesgos psicosociales y segmentación del mercado laboral.

En general, el análisis en el libro se inserta en el debate sobre las tendencias hacia la convergencia o divergencia de los modelos productivos y las relaciones laborales.