El Cártel Judicial es un poder tan letal como los grupos criminales más brutales. Una sentencia injusta, sin pruebas, con pruebas falsas o por intereses personales puede ser peor que la propia muerte. Al igual que una organización criminal, el Poder Judicial en México opera de manera turbia. Parece haber sido tomado como rehén, convirtiéndose en una cofradía de abogados que han olvidado su deber de administrar justicia. J. Jesús Lemus compara este nivel de gobierno con un cártel fallido, donde el Poder Judicial actúa como una organización criminal más en México, pero sin el secreto. En esta investigación periodística, se exponen los vicios arraigados dentro del Poder Judicial, con nombres, casos y eventos que muestran la urgencia de una reforma constitucional para cambiar esta estructura y garantizar la imparcialidad de los jueces. Los jueces actuales son descritos como dioses poderosos e inalcanzables, opacos y antidemocráticos.