En las antiguas páginas de libros pintados, los escribas mayas plasmaron predicciones y observaciones astronómicas. Aunque la mayoría se perdieron debido al tiempo o la destrucción, se sabía que tres códices mayas prehispánicos habían sobrevivido. En la década de 1960, en México, surgió misteriosamente un cuarto libro de diferente estilo. Después de medio siglo de debates sobre su autenticidad, investigaciones recientes utilizando análisis científicos y de historia del arte han confirmado que el Códice Maya de México (anteriormente conocido como Códice Grolier) es el libro más antiguo de América, superando a los demás por al menos doscientos años. Este libro ofrece una introducción detallada sobre la creación, descubrimiento, interpretación y verificación científica del Códice Maya mexicano. Además, incluye un facsímil a color y una guía página por página para hacer que el códice sea accesible a un amplio público.