En este libro se destaca la importancia de la Psicología Adleriana en el ámbito psicoterapéutico y educativo, así como su potencial inspirador en tiempos inciertos y convulsos. Alfred Adler, médico vienés y fundador de la Psicología Individual, señaló en el siglo XX que el «ansia de poder» es el origen de trastornos psicológicos y del sufrimiento humano en general. Este concepto puede aplicarse en el análisis de las sociedades contemporáneas, abordando problemas de salud mental, educativos y la crisis ecológica y civilizatoria. El pensamiento de Adler, con su enfoque ético y orientación al bien común, ofrece una filosofía para superar el deseo de poder y promover la justicia social y ecológica en una sociedad democrática.